miércoles, 7 de marzo de 2012

Todas las guerras conducen a la Casa Blanca


Claudia Rodríguez León

Foto tomada de la Internet

Cuando los presidentes Barack Obama y Nicolás Sarkozy, rechazaron (micrófono abierto) al señor Netanyahu, era de esperar que limasen esta inoportuna pifia que trascendió al plano internacional: "yo tengo que soportarlo todos los días", expresó Obama;no obstante, la oportunidad que llegó con creces ahora que el mandatario de Estados Unidos ha “canonizado” a su par israelí, de manera rotunda. El señor Barack, confirmó el apoyo de la Casa Blanca al estado sionista porque _en la continuidad de la guerra imperial por el control de los recursos energéticos en el Oriente Medio_,  resulta fundamental el respaldo israelí. Sin embargo, la situación involucra a otras potencias como China y Rusia, contrarias a esta guerra expansionista que pone en peligro la seguridad internacional en la región.
China se opone a todo tipo de interferencia extranjera en los asuntos internos de Siria, al tiempo que considera el diálogo como única vía para la solución de la crisis, según declaró Li Huaxin, enviado ministerial de Beijing, y enfatizó que resulta esencial se “respete la soberanía, independencia, unidad e integridad territorial de Siria. “
No obstante, ya el programa concertado por Estados Unidos y sus aliados ha comenzado. Los servicios de inteligencia y la prensa occidental (con su preparación artillera mediática no ha dejado de satanizar al gobierno Sirio y preparar el terreno para garantizar las operaciones de mercenarios y terroristas. Claro está, la inconsecuente estrategia de invasión se realiza con el previo acuerdo de la ONU (recuérdese las palabras del Secretario General y del Consejo de Seguridad).
Siria enfrenta actualmente -denunció Arnous- una feroz campaña mediática de distorsión y tergiversación de la realidad que desarrollan algunos medios y conocidos canales satelitales en referencia a al-Jazeera y al-Arabiya.
Llama la atención la prevista llegada a Damasco de la subsecretaria general de las Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios, Valerie Amos, para discutir la posibilidad de suministros con fines humanitarios. No podemos olvidar que, “esta ayuda humanitaria” se puso en práctica en Libia y permitió facilitar el suministro de armas a la oposición. Nada puede esperarse de las “buenas intenciones” de esta enviada de la ONU.
Por su parte, el presidente sirio Bashar al-Assad dijo que su pueblo "ha probado una vez más su habilidad de defender la patria y construir una renovada (…) al tiempo que combate el terrorismo respaldado desde el extranjero".
MOSCÚ NO CREE EN DADIVAS
La cancillería rusa reafirmó que la postura (presencia militar) con respecto a Siria no es temporal; aunque, en el principio, rechaza el uso de la fuerza militar y la interferencia en los asuntos internos sirios y desmintió las declaraciones de algunos funcionarios de Estados Unidos y de la Unión Europea, quienes relacionaron la postura de Moscú con el propósito de garantizar los intereses rusos después de los comicios presidenciales en los cuales ganó Vladimir Putin. "Quienes piensen así están errados", acentúa un comunicado de la cancillería rusa.
Lo cierto es que importantes medios de combate de Estados Unidos y sus aliados de la OTAN están presentes. La “luz verde” para iniciar el ataque depende del cabildeo diplomático que se dirime en la ONU, donde la Casa Blanca ya ha ganado los puntos necesarios con el respaldo del Consejo de Seguridad y el secretario general de las Naciones Unidas. En realidad todas las guerras imperiales conducen a las oficinas del aparato gubernamental en la Casa Blanca. El “premio nobel” de la paz, señor Barack Obama, pasará a la historia como el presidente norteamericano que ha llevado la guerra expansionista a una prioridad que jamás, conscientemente, le daría (como respaldo) el pueblo norteamericano. 
El propio señor Obama declaró que sería un error realizar un ataque unilateral contra Siria, de ahí que convoca a sus aliados y, por supuesto, alguno tendrá a su cargo (como le tocó a Francia en Libia) dar el primer raid aéreo contra Damasco. ¿De quién será el nuevo turno? Los señores de la guerra han lanzado sus dados.