jueves, 21 de junio de 2012

Google va a la guerra contra Cuba



Claudia Rodríguez León

Fotos tomadas de la Internet y caricatura de Lacoste (tomada de la Internet)

Sumario: La plataforma ciberespacial Google se une al Comando Ciberespacial para bloquear a Cuba. Así lo confirma la reciente declaración de un vocero de Google pone en entredicho el uso y descarga gratuitos de sus servicios y alega que violan las disposiciones del bloqueo impuesto por el gobierno de Estados Unidos contra la Isla.




"El gasto militar total ha crecido en estas dos décadas a la astronómica cifra de 1,74 millones de millones de dólares, casi el doble que en 1992, lo que arrastra a la carrera armamentista a otros Estados que se sienten amenazados.  ¿A dos decenios del fin de la Guerra Fría, contra quiénes se usarán estas armas?"
(Palabras del Presidente cubano Raúl Castro Ruz, en Río + 20)

La guerra en el ciberespacio fue declarada, oficialmente para el resto del mundo, cuando la Casa Blanca anunció la entrada del Comando Ciberespacial como parte del ejército de Estados Unidos. Desde entonces a la fecha el Complejo Militar Industrial aceleró sus proyectos de armas robotizadas de alta tecnología; a pesar de las consecuencias de la crisis generada por el capitalismo mundial en su fase imperialista. 

De hecho, el presidente Barack Obama, recibía el premio novel de la paz (reitero que me niego a escribir Nobel)_prácticamente al inicio de su mandato y sin merecerlo_, mientras con la otra mano (la siniestra) firmaba acuerdos para desarrollar nuevos artefactos bélicos especialmente diseñados para la fuerza aérea como es el caso de los drones y la creación de un Comando Ciberespacial que podría lanzar ataques, a cualquier nación del mundo, desde las redes conectadas a las plataformas de Internet.

La justificación de Google para entra en la guerra cibernética contra Cuba se relaciona con la prohibición del uso de Google Analytics un producto gratuito que funciona desde la red y no necesita ser descargado por los usuarios. Sin embargo, un vocero de la transnacional, el señor Christine Chen _gerente de Comunicaciones Globales y Asuntos Públicos de la megatransnacional_,  dijo que el bloqueo en Internet para los cubanos está definido en las sanciones que por más de 50 años ha impuesto Estados Unidos a la Isla. 

Tal pronunciamiento no puede pasarse por alto. El propio señor Chen reconoce que los usuarios cubanos “no debían haber utilizado el servicio de monitoreo de tráfico en línea porque estaban violando las disposiciones del (criminal bloqueo) embargo comercial de los Estados Unidos”. No obstante, aseguran que “Lo teníamos escrito en nuestros términos y condiciones. No se puede usar Google Analytics en los países sometidos a embargos”.

Esta variante de guerra contra Esta variante de guerra contra Cuba se basa en el cumplimiento de las políticas del Departamento del Tesoro“. Así lo confirmó el pasado martes, el sitio digital cubano, Cubadebate al denunciar la escandalosa censura del cierre del acceso a Google Analytics, ni a Google Earth, Google Destktop Search, Google Toolbar y Google Code Search, que supuestamente promueve las bondades del software libre, aplicaciones que ya estaban vedadas para los cubanos.

De esta manera se utiliza como arma de guerra el producto de una compañía que ofrece servicios indispensables para la transmisión de datos en todas las esferas del conocimiento de cualquier nación. En el caso de Cuba se imponen, con estas sanciones, restricciones criminales (si acudimos a los términos jurídicos) en el área de tecnología de comunicaciones de datos al prohibir la descarga de estos productos y servicios, pagados por la Internet, a los usuarios cubanos.
En este caso específico tenemos que nos cierran el acceso al uso de Google Earth _un servicio de mapas, y Google Toolbar_, que permite hacer búsquedas directas desde la parte superior del navegador sin visitar la página principal de Google. En cuanto a Google AdSense y Google AdWords _servicios que implican el intercambio de dinero_ ya había sido eliminados para Cuba; aunque no se limiten los chats, mensajes instantáneos y otros instrumentos de comunicación, que están autorizados en la sección 515.578 de las regulaciones del bloqueo contra la Mayor de las Antillas.

Por su parte, el señor John Sullivan, vocero del Departamento del Tesoro, indicó que “la decisión de Google (contradice lo alegado por el vocero Chen en cuanto a quién toma la decisión, valga la redundancia) de bloquear el programa de información analítica parece (¡¿….?!) estar en cumplimiento de las regulaciones de la OFAC [Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro]“, pero resaltó que solamente la compañía puede dar información acerca de sus acciones, afirmó.

Es hipócrita, más bien cínico en su argumento el señor Sullivan. La ofensiva contra Cuba es real. Hace unos días el señor Szubin, del Departamento del Tesoro, vociferó sus amenazas a quien se atreva a realizar transacciones comerciales o financieras con la Mayor de las Antillas. De lo contrario podría ser multado como hicieron a ING Bank, o el robo de la marca Havana Club, en franca violación del respeto a los acuerdos internacionales del comercio y sobre todo el mantener la obsoleta política de hostilidad contra Cuba; a pesar del rechazo de, prácticamente, todas las naciones del mundo a la vigencia de ese engendro criminal impuesto desde 1962.

Lo cierto es que nada esconde Washington en cuanto a lograr el aislamiento de Cuba. El propio señor Szubin lo expresó en sus amenazas: “nuestras sanciones reflejan los principales intereses de seguridad nacional y de política exterior de Estados Unidos, y la OFAC las aplica agresivamente. El anuncio debería servir como una clara advertencia a cualquiera que considere aprovecharse de evadir las sanciones de los Estados Unidos.”
Para el gobierno de Estados Unidos todo lo concerniente a Cuba se relaciona con la seguridad nacional, aun cuando estas medidas extraterritoriales afecten a sus ciudadanos, condenen al pueblo cubano a luchar contra el genocida bloqueo. 




A PROPÓSITO DE UN “FESTIVAL” DE MERCENARIOS CIBERESPACIALES

(Tomada de Cubadebate, sitio digital cubano)

Esta es la transcripción del diálogo que sostuvimos con el prestigioso activista social español Javier Couso sobre el denominado Festival Clic, evento patrocinado por entidades españolas y transnacionales norteamericanas.

Javier es muy conocido en España y gran parte del mundo por la lucha que sostiene para que se haga justicia en el caso de su hermano José Couso, camarógrafo asesinado por las tropas norteamericanas en Iraq.

-Tú que eres un activista digital muy conocido, ¿tenías noticias de la existencia de Evento Blog España (EBE), que patrocina este Festival Clic en Cuba?

-Me he quedado muy sorprendido, EBE es una organización de la que yo no tenía noticias. Dentro de lo que es el activismo o la gente que estamos en Facebook o, en Twitter, o que participan de una manera activa en lo social no teníamos noticias de esta organización. Por lo que he visto en su página, incluso han hecho grandes eventos en el País Vasco, con una línea además un poco diseminada. Es curioso que tiene un patrocinio que no deja lugar a dudas de quién está detrás de una organización de este tipo.

Si detrás esta Coca Cola, están grandes bancos y grandes empresas me parece que de activismo social tiene bastante poco. Que una organización prácticamente desconocida a nivel por lo menos de impacto en las redes sociales realice algo como esto, yo lo calificaría de un acto provocador en Cuba, pues me parece que si hilamos  y miramos, buscamos el recorrido del dinero, vemos quién está patrocinando y quién va a hospedar esta reunión, pues queda todo claro. Yo lo definiría con una sola palabra: injerencia.

O sea, otra de las agresiones que se realizan contra Cuba con fachada democrática para poder intervenir en un país independiente.

-¿Qué opinión te merece que en la situación económica existente en España esta organización, con el apoyo de un banco como el BBVA, dedique recursos a la injerencia en Cuba?

-Resulta absolutamente una paradoja (que ocurra esto) en una situación económica en mi país que es terrible y que cada día se va a poner peor por todas las medidas que están tomando -lo llaman eufemísticamente “el rescate”. Eso, y, bueno, todas las palabras que ellos se inventan para no contar la verdad. Realmente es un ataque a los estados nación, incluso al modelo de estado social que surge a partir de la Segunda Guerra Mundial.

En mi país hay miles de personas que van todos los meses a la calle, les quitan sus viviendas. Tenemos el nivel de desempleo de los más altos del mundo y los jóvenes y chicos y chicas perfectamente preparados, no van a encontrar trabajo.

Estamos viviendo en un modelo neoliberal que lleva al 60% de la población a la precariedad, a la miseria o la pobreza. Entonces, que una organización de este país con el patrocinio de estos mismos que nos están robando al pueblo español pretenda salvar a no sé que del pueblo cubano, me parece una absoluta provocación,  no solo contra Cuba, país soberano, sino también  para los ciudadanos y ciudadanas  de este país que nos están robando esos mismo que dicen que van a salvar a los cubanos.

Por lo tanto, expreso mi total repulsa, mi absoluta repulsa. Y es más, yo creo que la mayoría de la gente que estamos manifestándonos lo rechazamos. Hoy hay manifestaciones, ayer hubo manifestaciones apoyando a los mineros, hoy de los sindicatos, la movilización permanente del 15-M o de los profesores, sobre todo el 15-M.

El pretendido activismo que se intenta coptar por estas organizaciones, si se dieran cuenta la gente que está en la Asamblea de mi barrio, aquí al lado en la Asamblea de Vallecas o las Asambleas Populares del 15-M de cualquier barrio de este país. Detrás estas organizaciones como EBE están los mismos bancos que desahucian.

Hay que recordar el valor del 15-M, para mí el mayor valor son las plataformas  contra desahucios, esa gente que se movilizan todas las mañanas para intentar impedir esos desahucios. Si se enteran que esos mismos bancos pretenden ir a salvar a Cuba, pues yo creo que estarían muy enfadados. Por eso yo, por lo menos desde mi activismo, creo que hay desenmascarar a esta gentuza.

El verdadero activismo es contra los bancos con una banca pública o juzgar a estos señores que nos están robando el dinero y por recuperar nuestra soberanía nacional para que nuestros gobernantes defiendan mi país y que no defiendan los intereses bancarios, y todo eso que es absolutamente asqueroso.

BBVA además sirve para que la señora, no sé cómo llamarla, Yoani Sánchez, una persona pagada por toda la oligarquía occidental para subvertir a su propio país, pues resulta que tiene allí sus dineros de esos premios que le dan. Lo que antes se daba en sueldos ahora se da en premios,  para no vulnerar la ley, pues resulta que los tiene en el BBVA. Es muy sintomático las relaciones.

Como decía, no me acuerdo si era novela o película, pero aquello de “sigue la pista del dinero”, siempre resulta. La mayoría de la gente que colabora con el imperio, con las grandes corporaciones, ni siquiera lo hacen por un fundamento ideológico, sino por dinero. Por eso a muchos de ellos y de ellas que hay que llamarles mercenarios, y no estamos mintiendo.

En la foto, gusanitos punto click