jueves, 1 de mayo de 2014

El cinismo sin límites de Estados Unidos




 

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El cable de EFE, publicado por el nuevo herald, no sorprende; todo lo contrario: demuestra la urgencia de una nueva maniobra de Washington, después que Cuba denunciara la agresión provocada a través de la USAID con un programa subversivo llamado ZunZuneo.

En realidad se trata de la ejecución de un plan cuya segunda parte –de haberse logrado (el imposible) de una “primavera subversiva” en la Isla-, es la pre elaboración de la información acordada con EFE y “rebotada” en el nuevo herald”, bajo la autoría de la articulista Lucía Leal.

Resulta que el gobierno de Estados Unidos decidió (fíjense el uso del término decir en sentido impositivo, absoluto, imperialista, extraterritorial y arrogante)  mantener a Cuba en la lista de Estados que patrocinan el terrorismo, dentro de un informe en el que aseguró que la influencia de Irán en Latinoamérica es cada vez más limitada y que Venezuela propicia un “ambiente permisivo” con los terroristas”.

Cita a tres naciones sobre las cuales hace toda su presión la administración de Washington. Irán: el país que no pudieron atacar e invadir, como parte de la ofensiva imperial desatada contra Afganistán, Pakistán e Iraq, que (posteriormente) siguió con el asesinato e intervención en Libia, desató una situación compleja en Egipto, logró su propósito desestabilizador en Siria y pretendió generar los resortes de un conflicto bélico que permitiera a Israel lanzar raid aéreos contra instalaciones nucleares en Irán y puso en estado de alerta a Rusia y China. Todo este entramado de acciones agresivas se producen como parte de un guión que incluía cerrar el cerco sobre Rusia, mediante la cooperación de naciones vecinas dispuestas a cooperar con la Casa Blanca y que serían protegidas por el escudo antimisiles que hizo reír al presidente Vladimir Putin en una anécdota que pocos recuerdas pero viene al caso.

Seguidamente el supuesto vínculo iraní con la República Bolivariana de Venezuela a la cual, Washington, jamás reconoció después del triunfo electoral que mantuvo la decisión popular de continuar la Revolución Bolivariana bajo la conducción del Presidente Nicolás Maduro, a pesar de las presiones de la ultraderecha norteamericana en función de financiar y apoyar el regreso al poder de una representación oligárquica (López, Capriles o Corina) que represente los intereses norteamericanos sobre los recursos naturales del país sudamericano.

En cuanto a Cuba, era de esperar (en el mes de abril, como si olvidaran la derrota que propinó el pueblo durante la invasión por Playa Girón, en 1961) buscaron la versión de atacar mediante un programa: ZunZuneo con el propósito de posibilitar un “levantamiento” y manifestaciones de desobediencia civil contra el gobierno cubano.

La Casa Blanca ha “decidido” mantener a la Mayor de las Antillas en el listado de “naciones terroristas” -desde 1982- que implica la imposición de sanciones (recrudecimiento del bloqueo genocida y otras regulaciones extraterritoriales) como la prohibición de ayuda económica o venta de armas. Según la portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf, expresó que: “la decisión de eliminar o mantener a un país de la lista puede tomarse en cualquier momento y que, de momento, no hay planes para quitar a Cuba”.

El gobierno de Estados Unidos, el país que más muertes ha provocado en toda la historia de la humanidad, advierte de forma cínica y cuestionable.

¿Quién debería estar sentado en el tribunal internacional de la Haya (si funcionara, por supuesto, en este caso)? Por supuesto que el gobierno de Estados Unidos.


http://www.cubadebate.cu/especiales/2014/04/30/cuba-rechaza-manipulacion-por-eeuu-del-tema-del-terrorismo/#.U2I5cnZpzUc


El monumento más grande defendido por un pueblo













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Nada se repite en cada acontecimiento que marca una nueva victoria del pueblo cubano en su histórica Plaza de la Revolución. El lugar se ha convertido en referencia de la clase proletaria del mundo por ser el sitio de convergencia de grandes acontecimientos que demuestran la posibilidad de un mundo mejor en medio de las terribles crisis provocadas por el imperialismo y sus aliados, las guerras por el control de los recursos naturales del planeta y la enajenación de millones de seres humanos manipulados desde las plataformas mediáticas que controlan el ciberespacio.
Pero la verdad de Cuba no puede ocultarse. Varias generaciones de cubanos participan en defensa de las conquistas logradas por una nación que se impone al férreo y criminal bloqueo impuesto por el gobierno de Estados Unidos, durante más de cinco décadas. En todo el país marchan millones de personas en celebración del Día Internacional de los Trabajadores, acompañados por miles de turistas que participan (algunos con sus hijos) en busca de un espacio solidario alejado de la represión policial que se producirá hoy en países donde los trabajadores reclaman derechos a los gobiernos.
En la Plaza de la Revolución, iniciarán el desfile los trabajadores del sector de la Salud Pública, en representación de los miles de compatriotas que ofrecen su apoyo solidario en diferentes naciones del mundo.
Ahí, frente al monumento erigido a José Martí, ondearán banderas multicolores, y estará eternamente la presencia del líder histórico de la Revolución cubana, Comandante en Jefe, Fidel, en las frases que expresará el pueblo, en las ideas compartidas durante años de combate y de victorias contra la guerra de pensamiento que impone Washington.
Nadie. Ninguna agencia en el mundo podrá ocultar esa verdad, aunque sus reportes sean limitados a segundos de referencia, miles de imágenes circularán de inmediato por el ciberespacio, como prueba de que Cuba vive y defiende el monumento a la libertad y el derecho de los trabajadores más grande que se ha erigido en todo el mundo: el ejemplo de continuar su independencia y soberanía para construir una sociedad socialista sólida, próspera y sostenible.