sábado, 8 de marzo de 2014

Washington (OEA) vs Venezuela: Huele a azufre





La “rápida” intervención del Consejo Permanente de la OEA, bajo la sombra de Washington, aprobó la declaración que llama a todos los sectores de la sociedad venezolana a respetar los derechos humanos y hace votos para que las investigaciones relacionadas a las 21 muertes en cuatro semanas de protestas callejeras "tengan una rápida y justa conclusión".
Así lo describe El Nuevo Herald, en la cruzada mediática para desacreditar al gobierno del Presidente Bolivariano Nicolás Maduro y reducir a cero el pronunciamiento de respeto a las decisiones _sin interferencias foráneas en los asuntos internos_ de los estados miembros de la CELAC y, de paso, revitalizar la posición regente de la obsoleta OEA;  como si fuera la organización regional capaz de encontrar la cooperación entre los países miembros.
De hecho tal intervención refuerza el criterio intervencionista de la Casa Blanca, al pretender confundir a la opinión pública internacional con respecto a un conflicto generado con el apoyo de los servicios de inteligencia de Estados Unidos, Israel y la Unión Europea, para crear las condiciones de violencia y desobediencia civil en la población de un estado soberano, mediante el apoyo logístico, financiero y mediático de esta coalición imperialista para crear, en Venezuela, una guerra civil que facilite la intervención _como segundo paso del Consejo de Seguridad de la ONU_ y proponer la intervención militar directa de tropas norteamericanas.
Según, El Nuevo Herald, la declaración “exhorta a la paz y rechaza toda forma de violencia”, cuando se conoce que la OEA, jamás representará los interese genuinos de los pueblos que la integran, sino los del gobierno de Estados Unidos. Huele a azufre, como señalara el físicamente desaparecido Comandante Hugo Rafael Chávez Frías, con respecto a la presencia de Washington como una sombra diabólica que demuestra los intereses expansionistas del imperio norteamericano.
El acuerdo fue aprobado “tras una tortuosa sesión que comenzó el jueves por la tarde y se prolongó durante al menos 15 horas de tediosas negociaciones. Contó con 29 votos a favor y tres en contra de Estados Unidos, Canadá y Panamá”.
Solo ver los que están en contra, permite entender el pronunciamiento siguiente de la obsoleta OEA, al solicitar “que seis expertos adscritos al comité de las Naciones Unidas para los derechos humanos preguntaron a Caracas sobre acusaciones relacionadas a que las fuerzas de seguridad han propinado palizas y torturas graves a algunos manifestantes, quienes habrían sido trasladados a instalaciones militares”.  Total infamia.
El gobierno títere de Panamá, había solicitado la sesión extraordinaria de la OEA para facilitar la jugada a Washington y lo demostró al criticar, en la declaración el Consejo Permanente de la OEA, la “necesidad” de un pronunciamiento sobre la situación en Venezuela porque "la OEA debe tener una actitud más dinámica".
Por su parte, la embajadora estadounidense (ante la OEA) Carmen Lomellin explicó que decidió (su país) votar en contra porque el texto "tendría que ir más allá y presentar un compromiso de la organización a principios democráticos. Tiene partes buenas, pero no lo suficiente".
Para Washington lo suficiente es el derrocamiento de la Revolución Bolivariana de Venezuela, de forma violenta. Es por eso que el presidente venezolano Nicolás Maduro rechaza que la situación de su país sea analizada por la OEA y considera el bloque regional Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) es el foro más apropiado.
Por su parte Washington continúa la conjura y esparce su peligrosa influencia cargada de azufre para dividir a nuestros pueblos del Sur y evitar que puedan impedir _como previera nuestro José Martí_, que el imperio yanqui se apropie, con el apoyo de gobiernos lacayos y serviles, de nuestras sufridas tierras de Latinoamérica.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Sus opiniones serán el punto de partida para nuevos artículos. Agradeciendo la diversidad de criterios y los puntos de vista convergentes o divergentes en relación con los temas abordados o sugeridos por los lectores de este blog.