viernes, 6 de enero de 2012

El clavo caliente del nuevo herald


Claudia Rodríguez León

Fotos tomadas de Cubadebate e Internet


No pude sustraerme a la risa cuando leí el titular de el herald sobre un supuesto emplazamiento, de un comentarista “estatal” de la televisión cubana, al gobierno cubano. Por supuesto, cualquiera que no conozca la realidad de la Mayor de las Antillas, puede irse con la de trapo ante la posición destacada que dio en su página digital el libelo de Miami a tal referencia, disparatada, por cierto.
Así dice el reporte que se acredita a la AFP:
“El principal comentarista económico de Cuba, Ariel Terrero, pidió este jueves públicamente al gobierno de Raúl Castro “más audacia” para captar inversiones extranjeras en la isla, pues en los últimos años han estado “estancadas”.
“Las inversiones extranjeras han estado más bien estancadas en los últimos años en mi opinión personal; es una fuente de financiamiento que hay que explorar con más audacia”, dijo Terrero en su comentario semanal en la televisión estatal.
“No olvidemos nunca que (las empresas extranjeras) vienen buscando ganancia, no vienen buscando desarrollo de la economía cubana ni mucho menos, pero hay que ir a ellas porque es una manera de acceder a capital”, añadió”. La opinión de Terrero y subrayó: “en mi opinión personal” contradice la supuesta censura que someten a los periodistas en la Isla. Incluso, ratifica que es la opinión de quien, durante años, ha tocado temas mucho mas calientes en sus apariciones en la televisión cubana, con críticas contundentes a organismos y ministerios que no han actuado en correspondencia con las necesidades de desarrollo del país.
No es un emplazamiento. Todo lo contrario, ha sido (precisamente) la máxima dirección del Partido y sobre todo en su VI Congreso quien ha llevado los temas acuciantes para debatirlos con el pueblo. El próximo mes tendrá lugar la Conferencia Nacional para evaluar el resultado de las medidas aplicadas en relación con los Lineamientos de la Economía cubana. Nada oculto tras estos análisis que se debaten en la calle a todo lo ancho y largo del país.
Incluso, sugiero a el nuevo herald, que consulte las intervenciones del líder histórico de la Revolución cubana, Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, para que se tenga en cuenta los mayores emplazamientos realizados frente a los errores cometidos en estos años y, sin ánimo de justificarlos, muchos de estos errores se deben a las presiones provocadas por el bloqueo impuesto a Cuba durante más de medio siglo. No se puede obviar que el bloqueo causa pérdidas millonarias y obliga a tomar decisiones que muchas veces no son las mejores y también ha permitido cierto resquebrajamiento de la disciplina administrativa, la falta de exigencia y actividades lucrativas (corrupción debido a la situación que atraviesa el país por la medida extraterritorial impuesta por el gobierno de los Estados Unidos).
El herald reporta que: “Cuba se abrió a las inversiones extranjeras en 1993, con las reformas moderadas que aplicó el entonces presidente Fidel Castro, tras la crisis que significó la desaparición de la Unión Soviética, su principal sostén financiero luego del triunfo de la revolución en 1959.
Su hermano Raúl Castro, quien lo sucedió en el 2006 en el mando de Cuba, ha mantenido esa línea dentro de un programa de reformas para “actualizar” el agotado modelo económico”.
Hago un aparte: el modelo económico cubano, apoyado sobre la esencia de una política de beneficio mayoritario, previsto para un sistema social Socialista, no está agotado. Todo lo contrario, ha sido continuamente analizado por la dirección del Partido y el Gobierno cubanos. El proceso de Perfeccionamiento Empresarial recoge aspectos específicos de esta búsqueda de variantes más efectivas para poder enfrentar no solo las crisis internacionales provocadas por el sistema capitalista, sino evitar las sanciones que reciben las empresas que intentan comerciar con nuestro país, por la continúa vigilancia de las agencias de inteligencia estadounidenses y en función de hacer cumplir el riguroso y genocida bloqueo contra la Isla.
Continúa el herald: “Las inversiones extranjeras, generalmente conjuntas con capital estatal local, fueron normadas por una ley en 1996, pero su avance ha sido cauteloso y restringidas a sectores donde puedan aportar tecnología y mercado”.
No podía ser de otra forma: Estados Unidos también aplica sanciones a los barcos que tocan puertos cubanos, a los bancos que aportan financiamiento e incluso, a las filiales de productos médicos que se atreven a comerciar artículos necesarios para los hospitales cubanos. Esto por no hablar de tecnología.
Sigue el herald y le llama, para colmo, al bloqueo, embargo: “Tras recordar el freno al crecimiento que significa el embargo estadounidense sobre la isla, vigente desde 1962 y que limita las inversiones de otros países, Terrero señaló que las inversiones son “una manera de acceder a ese capital que necesita la economía cubana para abrirse espacios en el comercio internacional”.
“Desde hace dos años, La Habana no publica cifras sobre las inversiones extranjeras en el país.
En diciembre del 2009, el diario oficial Granma dijo que en ese año el número de empresas mixtas con capital extranjero disminuyeron de 314 a 258 debido a los efectos de la crisis financiera internacional, las dificultades internas de la economía y el embargo estadounidense.
Según un reciente anuncio oficial, las inversiones extranjeras se concentran en el turismo, el petróleo y la minería.
Varias empresas extranjeras tienen contratos de riesgo para buscar petróleo en la zona económica marítima de la isla, y se prevé que las perforaciones comiencen en las próximas semanas”.  AFP
Me sumo a la opinion del colega Ariel Terrero y a lo expresado por el Primer secretario del Partido Comunista de Cuba y Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, General de Ejército Raúl Castro Ruz, en el VIII Período Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular, el 23 de diciembre de 2011. Cito la crítica abierta del dirigente cubano a errores cometidos:
“Lo anterior se puso de manifiesto, por solo citar un ejemplo, en los suministros fraudulentos de productos agropecuarios a los mercados de la capital, que no existieron, ni se cultivaron, generando un desfalco de más de 12 millones de pesos a causa del actuar delictivo de directivos, funcionarios y otros trabajadores de las empresas estatales comercializadoras, así como de agricultores pequeños que se prestaron como testaferros, a todos los cuales se les exigirán responsabilidades administrativas y penales, en correspondencia con la gravedad de los hechos.
Traigo el tema a colación para ilustrar la necesidad imperiosa de que todos los que dirigimos en los diferentes niveles, desde la base hasta los máximos cargos del país, asumamos una conducta firme ante la indisciplina y el descontrol en los cobros y pagos, que constituyen una de las causas y condiciones principales para el delito. Estoy convencido de que la corrupción es hoy uno de los principales enemigos de la Revolución, mucho más dañino que la actividad subversiva e injerencista del gobierno de Estados Unidos y sus aliados dentro y fuera del país.
La Contraloría General de la República, la Fiscalía y los órganos especializados del Ministerio del Interior, tienen instrucciones de combatir este flagelo, con toda la severidad que permiten nuestras leyes,  como en su momento se enfrentó exitosamente el incipiente tráfico de drogas a partir de enero de 2003.
En esta batalla estratégica se ha elevado la coordinación, cohesión y exigencia en el enfrentamiento al delito y comienzan a verse algunos resultados, tanto en los hechos llamados de “cuello blanco”, cometidos por directivos y funcionarios nacionales y extranjeros vinculados con el comercio exterior y la inversión extranjera, como en las fechorías llevadas a cabo por delincuentes comunes en contubernio con dirigentes administrativos y empleados de dependencias estatales, en los procesos productivos, la transportación y distribución en entidades de la industria alimentaria, el comercio, la gastronomía, el sistema de la vivienda y los ministerios de la Industria Básica y la Agricultura.
Precisamente, en el sector agropecuario, desde el primero de agosto del presente año se fortaleció, de manera sensible el combate contra el hurto y sacrificio de ganado mayor y la consiguiente comercialización de su carne en el mercado negro, un fenómeno que a lo largo de los años floreció con determinada impunidad, provocando graves afectaciones a productores estatales y privados, no sólo desde el punto de vista económico, sino también moral y social”.
Se trata de un emplazamiento justo y consecuente para resolver los problemas que enfrentamos los cubanos de la Isla. Esto lo debería publicar el herald.

La secuencia de fotos ilustra desde una base de contenedores hasta la presencia de cruceros en puertos cubanos, por supuesto, estas naves no pueden entrar a territorio estadounidense hasta pasado seis meses. También imágenes de trabajadores por cuenta propia como un estímulo al saneamiento de la economía interna. 









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